Polvo en actividades de bricolaje

Es poco probable que las actividades ocasionales de bricolaje expongan a las personas a niveles elevados de polvo durante un periodo de tiempo suficiente como para tener un efecto negativo sobre la salud. Sin embargo, reducir el polvo en la medida de lo posible durante los trabajos de bricolaje es una precaución sensata.

De hecho, la mayoría de los productos de construcción (por ejemplo, tejas, ladrillos, mortero) contienen sílice cristalina. La sílice cristalina, cuya forma más común es la arena, es un mineral de origen natural y un ingrediente vital en muchos productos que utilizamos a diario, incluidos casi todos los tipos de materiales extraídos de la corteza terrestre que son a su vez materias primas para los productos de la construcción.

En contextos de consumo cotidiano, la sílice cristalina no supone un riesgo para la salud. 

El polvo de sílice sólo supone un riesgo para quienes trabajan en centros industriales. El polvo, muy fino, no se desplaza en altas concentraciones más allá del entorno directo de los procesos industriales y se dispersa rápidamente en el aire libre.

Existen medidas sencillas para evitar la generación de polvo y, al evitar el polvo, también evitamos la exposición al polvo de sílice cristalina.
Este sitio web ofrece consejos de buenas prácticas para que los consumidores que puedan estar expuestos al polvo durante las actividades de bricolaje lo minimicen al máximo con medidas muy sencillas.

La guía aborda las tareas típicas de desempolvado con un enfoque genérico, no aborda cómo utilizar / aplicar los productos, para lo cual deben seguirse las instrucciones del fabricante.Es poco probable que las actividades ocasionales de bricolaje expongan a las personas a niveles elevados de polvo durante un periodo de tiempo suficiente como para tener un efecto negativo sobre la salud. Sin embargo, reducir el polvo en la medida de lo posible durante los trabajos de bricolaje es una precaución sensata.